viernes, 5 de febrero de 2010

Las cositas que pasan...

Vaya par de semanitas que llevo, mis queridos niños y niñas. Mi suegro nos dio un susto importante que, por fortuna, se ha quedado sólo en eso: en un susto y, a partir de ahora, a cuidarse.
Luego, a mi gordito se le metió en el estómago un virus cabrón de esos que traen consigo vómitos y fiebres altas. Hoy, al fin, parece que comienza a remitir. Es habitual que esto les pase a los críos, pero es la primera vez que mi gordo, a punto de sus tres años, se pone malito...como me encuentre por la calle a ese virus malnacido le cortaré la yugular sin miramientos.
Todo ello me ha mantenido alejado de vuestros blogs. Ya creo que podré recuperar la normalidad. Mis disculpas van por delante.
Sin embargo, entre ratos de cierta tranquilidad, Juan "El Manteca" sí ha podido cumplir con la misión de su columna semanal, la que hoy leeré en su nombre en "La Radio de los Blogueros" y la que, si quieren, ya pueden leer en su blog. Hoy: "Los amos del mundo".
Gracias y besos para todos.

11 comentarios:

José Miguel Ridao dijo...

Vaya, me alegro de que todo haya quedado en sustos. Y de los virus mejor hazte amigo. No te quea na...

Un abrazo.

Lisset Vázquez Meizoso dijo...

Me alegro que tu mar vuelva a la calma y que tu gordito se ponga bueno pronto. Mi niña anda igual estos días, aún así esta tarde me la llevo con mi Juan para que la conozcais y os pase un poco de virus de los bonitos, porque en ella, hasta los bichos son encantadores :) Besos.

sevillana dijo...

Me alegro de que tu gordito esté ya bien, pero te anuncio que con la edad que tienen los dos te queda más de un susto que pasar, así que tomatelo con tranquilidad que estos enanos salen de todo.
Besitosssssssss

Susana Peiró dijo...

Querido Juan Manuel: Lo primerísimo: qué bueno dejar atrás los "sustitos"!! y alegrarme por la recuperación de tu pequeño precioso y de tu suegro.

Luego, recordemos juntos que la tarea bloggeril es un voluntariado. A veces es sencillamente imposible visitar a los Amigos como deseamos y mantener nuestros espacios al día...estamos ocupados viviendo! atendiendo compromisos de todo tipo!

De modo que sentite comprendido y sobre todo, querido y esperado!

Vuelvo por la columna de Manteca!

Besotes mi cielo, muchos y a mogollón ¿qué tal mi español? Jajajajajá!

Marisa Peña dijo...

Bueno por eso pasamos todos los padres.es terriuble ver a los niños malitos, impotentes para quitarles el dolor,¿verdad? Bueno te aseguro que todo pasa y aunque no te acostumbras a verlos pachuchos te armas de paciencia y a torear "itis" varias.Besos y cuidaos todos.

mangeles dijo...

Pues me parece que tú gordito, se habrá quedado delgadillo, pero habrá dado un estirón..que dicen que los niños cuando tienen fiebre ¡crecen¡...

Me alegro de que todo vaya mejor,amigo.

Besotes

carmen jiménez dijo...

Ay Juanma! Estoy entusiasmada! Estaba leyendo las cositas que te pasan, y justo me doy cuenta que hoy es viernes, que todavía tengo tiempo, por fin! de escucharte en vivo y en directo y allá que me voy a buscar el enlace de Radio Sevilla y te escucho recitar las últimas líneas de Juan "El Manteca". Por supuesto leeré la columna completa y ahora que he aprendido la escucharé completa de tu voz.
A Juanmita un beso. Me encantó eso de que estuvieras dispuesto a cortarle la yugular sin miramietos, pero ten cuidado que puedes acabar como un asesino en serie. Aunque a juzgar por la salud del gordito, no creo que tengas ese problema.
Recuerdos a Lola y a su padre, que los sustos, sustos son, pero asustan de verdad.
Besos

Fernando Moral dijo...

Como dice Ridao, no te quedan mocos que limpiar, pero bueno, casi mejor así que como estoy yo. Los virus que asaltan a las adolescentes tienen dos patas y la cara llena de granos. Eso sí, son igual de cabrones ;-)

Un abrazo.

Capitán dijo...

Todo sean cositas, y los virus, bueno, acaban siendo casi de la familia, y eso que los míos casi nunca atacan

Un abrazo

Lola Montalvo dijo...

Salud para ti y para tu hijo... ese virus cabrón debe ser invisible pero es jodío, jodío!!!
Besos miles

Lola Montalvo dijo...

Ah, y salud también para tu suegro... que me despisto!